Folladas por los dependientes del sex shop
Esta madre e hija entran a un sex shop para comprar un par de consoladores para regalarselos por su cumpleaƱos a una amiga. La madre que tiene pintas de zorra se queda con el dependiente, un joven mulato que segun ella tiene que tener un pollon tremendo y ante el asombro de su hija les dice a los dependientes del sex shop que lo cierren durante veinte minutos que tanto ella como su hija quieren follar con ellos. Los chicos ni se lo piensan y se follan a la madre y a la hija.