Sexo con la cuñada antes de desayunar

Qué buenos los domingos, sobre todo esos en los que uno tiene todo el día por delante sin ningún tipo de compromiso, esos en los que no hay prisa por hacer nada y el tiempo puede disfrutarse como dé la gana. Esos domingos en los que uno puede levantarse, preparase el desayuno y tomarlo tranquilamente, sin apuros, leyendo el periódico. Y mucho mejor aún aquellos en los que la diosa de tu cuñada se lavanta al mismo tiempo que tú y quiere desayunar contigo … bueno, mejor dicho, quiere darte el desayuno de una forma muy especial. Qué grandes los domingos en compañía de una delicia como Ivana Sugar.